Vida saludable
La creciente amenaza de la obesidad infantil
Según los CDC, más niños que nunca no sólo tienen sobrepeso, sino que en realidad son obesos. De hecho, los números se han triplicado desde la década de 1970 y en 2016, los datos mostraron que casi uno de cada cinco niños en edad escolar (de entre 6 y 19 años) en los Estados Unidos tiene obesidad. Se trata de una tendencia llamativa que puede tener consecuencias a largo plazo para la salud, incluida una esperanza de vida más corta.
¿Qué determina la obesidad frente al sobrepeso?
El sobrepeso en niños y jóvenes se define como tener un índice de masa corporal (IMC) igual o superior alpercentil 85 y menor que elpercentil 95 para jóvenes de la misma edad y sexo.
La obesidad en niños y jóvenes se define como tener un IMC igual o superior alpercentil 95 para jóvenes de la misma edad y sexo.
El índice de masa corporal es el peso de una persona en kilogramos dividido por la altura de una persona en metros al cuadrado. Sin embargo, los profesionales de la salud recomiendan que el percentil del IMC se utilice para niños y jóvenes de 2 a 20 años de edad porque todavía están creciendo y a diferentes tasas en función de su edad y sexo.
¿La obesidad infantil afecta la salud y el bienestar?
Los efectos de la obesidad infantil pueden ser inmediatos y a largo plazo, y pueden incluir:
- Mayor riesgo de otras afecciones y enfermedades crónicas, como asma, apnea del sueño, problemas óseos y articulares, diabetes tipo 2 (anteriormente conocida como diabetes de “inicio en adultos”) y factores de riesgo de enfermedad cardíaca.
- Aislamiento social, depresión, baja autoestima por tasas más altas de bullying y burlas en comparación a otros niños de peso promedio.
- Mayor probabilidad de obesidad cuando llegue a adulto, lo que aumenta su riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes, síndrome metabólico y varios tipos de cáncer
¿Qué causa o contribuye a la obesidad infantil?
El desequilibrio energético es un factor clave de la obesidad en Estados Unidos. Básicamente significa consumir más energía de los alimentos y bebidas que el cuerpo utiliza para un funcionamiento saludable, crecimiento y actividad física. Este desequilibrio puede conducir a un aumento de peso adicional con el tiempo.
Otros factores que contribuyen a la obesidad incluyen:
- Genética
- Metabolismo – el proceso para transformar los alimentos y el oxígeno en energía para que el cuerpo los use
- Dormir poco
- Hábitos alimentarios y falta de actividad física para compensar el consumo
- Falta de acceso a parques y/o actividades recreativas regulares
- Dieta familiar o infundida culturalmente que no sea alta en frutas, verduras y opciones saludables y baja en carbohidratos, grasas, bebidas azucaradas y dulces
Para ayudar a tu familia a mantener un peso saludable, consulta nuestros consejos y recetas de vida saludable y realiza al menos 30 minutos de ejercicio tres o más veces a la semana. Puede ser tan sencillo como dar un paseo en familia, tener una competencia de saltos o flexiones de brazos, o dar una fiesta de baile espontánea con tus ritmos favoritos, lo que sea que te haga moverte y divertirte.
Si alguien en tu familia está experimentando problemas de salud o está interesado en opciones de pérdida de peso, comunícate con nosotros para ayudarles a encontrar un médico o especialista.