Un corazón saludable es la mejor defensa que puede tener

La enfermedad cardíaca es el asesino número uno en nuestro país y esto no ha cambiado a pesar de la pandemia. Más estadounidenses mueren por enfermedades cardiovasculares que por todas las formas de cáncer combinadas. Ahora más que nunca, es importante que usted conozca su riesgo de padecer enfermedades cardíacas y si le han diagnosticado alguna, que se mantenga al día con su tratamiento. Según los CDC, 4 de cada 10 personas informaron haber evitado atención médica debido a las preocupaciones sobre la COVID. Su salud cardíaca no puede esperar; realice una evaluación de riesgos para su salud o visite a su médico hoy mismo.

Dicho esto, hay muchas buenas noticias. Debido a que se conoce tanto acerca de los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares, así como las formas de tratarlas, usted puede trabajar con sus médicos para reducir en gran medida su riesgo de sufrir un ataque cardíaco, un accidente cerebrovascular y otros problemas cardiovasculares. Incluso ahora, los hospitales y consultorios médicos son el lugar más seguro para estar si está experimentando una emergencia médica.

Causas de las enfermedades cardíacas

Una serie de condiciones, hábitos y otros factores aumentan los riesgos de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Algunos escapan a su control; por ejemplo, el riesgo de todos aumenta con la edad. Pero la mayoría de los factores de riesgo están bajo su control y hacer cambios importantes en el estilo de vida puede mejorar sus probabilidades de disfrutar de una buena salud cardíaca.

Algunos de los factores de riesgo que usted puede controlar:

• HÁBITO DE FUMAR: Este es el factor de riesgo controlable más importante para las enfermedades cardiovasculares; el riesgo de un fumador de desarrollar enfermedades cardíacas es mucho mayor que el de los no fumadores. Fumar también actúa con otros factores para aumentar el riesgo general.
• COLESTEROL ALTO: A medida que su nivel de colesterol en sangre aumenta, también lo hace su riesgo de padecer una enfermedad cardíaca. Hay tres tipos de colesterol: lipoproteína de alta densidad (HDL, o colesterol “bueno”); lipoproteína de baja densidad (LDL, o colesterol “malo”); y triglicéridos.
• HIPERTENSIÓN ARTERIAL: La presión arterial mide qué tan fuerte está trabajando el corazón para bombear sangre. La hipertensión estresa su corazón con el tiempo y endurece el músculo por lo que aumenta el riesgo de sufrir un ataque cardíaco, un accidente cerebrovascular y otras afecciones.
• OBESIDAD O SOBREPESO: Debido a que el sobrepeso o la obesidad pueden elevar los niveles de colesterol, aumentar la presión arterial y desencadenar la diabetes tipo 2, constituyen un factor de riesgo importante para las enfermedades cardíacas y el accidente cerebrovascular
• DIABETES TIPO 2: Las personas con diabetes tienen de dos a cuatro veces más probabilidades de padecer una enfermedad cardíaca o sufrir un accidente cerebrovascular. Si usted tiene un diagnóstico de prediabetes o diabetes, significa que sus niveles de glucosa (azúcar) en sangre son altos, lo que a su vez conduce a un aumento de la acumulación de placa en las arterias.

Tipos de enfermedades cardíacas

Estas son algunas de las condiciones cardiovasculares más comunes:

Ataque cardíaco

Su corazón es un músculo, y necesita oxígeno para mantenerse vivo. A veces, la placa (sustancia compuesta de grasa y colesterol) se acumula en las arterias que alimentan el corazón, o la placa se desprende y forma un coágulo que bloquea, incluso completamente, el flujo sanguíneo al músculo cardíaco, privándolo de oxígeno y otros nutrientes. Eso se llama isquemia y cuando el músculo cardíaco comienza a morir como resultado de la isquemia, se llama ataque cardíaco o infarto del miocardio.

Accidente cerebrovascular isquémico

Al igual que en un ataque cardíaco, el accidente cerebrovascular isquémico ocurre cuando la placa se acumula en las paredes de las arterias. En este caso, sin embargo, la placa que puede formar un coágulo ocurre en un vaso sanguíneo que conduce al cerebro. Cuando se interrumpe el suministro de sangre a una parte del cerebro, las células cerebrales mueren afectando potencialmente su capacidad para hacer cosas como caminar o hablar.

Arritmias

En pocas palabras, una arritmia es un ritmo anormal. Aunque el corazón en sí es un músculo, está controlado por un ritmo eléctrico y cuando ese ritmo se sale de control, el corazón no hace su trabajo correctamente. Las arritmias pueden adoptar la forma de un ritmo demasiado rápido (taquicardia) o un ritmo demasiado lento (bradicardia). También usted puede presentar fibrilación auricular, que es cuando un ritmo errático en las cámaras superiores del corazón lo hace vulnerable a un accidente cerebrovascular, o fibrilación ventricular, que consiste en un ritmo errático en las cámaras inferiores del corazón, que es muy grave y puede desencadenar un paro cardíaco.

Enfermedad de las válvulas cardíacas

Su corazón tiene cuatro válvulas, y cada válvula tiene un colgajo de tejido que se abre y se cierra cada vez que su corazón late, controlando el flujo de sangre dentro y fuera de las cuatro cámaras del corazón. Hay tres problemas principales que afectan a las válvulas cardíacas: la regurgitación, que es cuando la válvula no se cierra herméticamente y permite que la sangre retroceda; la estenosis, que es cuando los colgajos de la válvula se endurecen o fusionan, por lo que la válvula no puede abrirse por completo; y la atresia, que es cuando a una válvula le falta completamente una abertura. Algunos problemas de las válvulas cardíacas son congénitos, lo que significa que usted nace con ellos. En algunos casos, se puede tener un problema de válvula cardíaca durante toda la vida y no experimentar síntomas. O los problemas pueden empeorar progresivamente y con el tiempo conducir a otras enfermedades cardiovasculares como un accidente cerebrovascular o un ataque cardíaco.